Dedicado a servir en comedores, albergues y retiros de Emaús

En un mundo donde el ritmo acelerado de la vida y las responsabilidades diarias muchas veces impiden mirar más allá de las propias necesidades, aún existen personas que han hecho del servicio desinteresado una vocación. Tal es el caso de Jorge Espino Méndez, un hombre cuya vida se ha convertido en un testimonio de entrega, fe y compasión hacia los más necesitados de su comunidad. Su labor en comedores infantiles, albergues y retiros de Emaús ha tocado la vida de muchas personas, no solo por lo que ofrece materialmente, sino por el amor y esperanza que transmite en cada acto de servicio. Un corazón al servicio del prójimo Desde muy joven, Jorge mostró una sensibilidad particular por las personas en situación helpless . Aunque su infancia no fue fácil, sus experiencias personales lo motivaron a buscar formas de ayudar a quienes enfrentaban dificultades mayores. Fue en los comedores comunitarios donde descubrió su primera vocación: alimentar no solo el cuerpo, sino también el alma...